Cuando hablamos de remedios caseros con aceite de oliva no nos referimos sólo a tratamientos de belleza sino a auténticos “antídotos” para paliar ciertas dolencias que se ven reducidas gracias a los enormes beneficios que el aceite de oliva tiene para la salud en comparación con el escaso gasto económico que acarrea.
1. Remedio casero para repeler mosquitos
Muy útil en estas fechas en las que ya empiezan los calores, para elaborarlo utilizaremos aceite de oliva y aceite esencial (puede ser de canela, ricino, limón, citronela o eucalipto). Utilizaremos entre 10 y 25 cucharadas el aceite esencial escogido dependiendo de la intensidad del aroma que deseemos alcanzar y dos cucharadas de aceite de oliva.
Mezclaremos ambos aceites y los aplicaremos sobre la piel, teniendo cuidado de que no entre en contacto con los ojos, la nariz o la boca.
2. Remedio casero para los reumatismos y torceduras
Podemos usar el aceite de oliva como antiinflamatorio para aliviar el dolor ya que posee propiedades similares a las del ibuprofeno, por ello, ante un caso de reumatismo o torcedura es muy beneficioso darse un masaje con una o dos cucharadas de aceite de oliva, durante unos diez minutos para que éste se absorba bien y alivie la zona afectada.
3. Remedio casero para desintoxicar el organismo
Podemos ayudar a nuestro hígado a realizar su trabajo de forma más eficaz si tomamos en ayunas una combinación de aceite de oliva y limón y esperando media hora antes de ingerir cualquier otro alimento.
Esta bebida a base de agua, aceite de oliva y limón ayuda a desintoxicar nuestro organismo y la podemos elaborar de forma muy sencilla introduciendo en la licuadora una cucharada de aceite de oliva, un limón troceado y un vaso de agua. Es muy interesante después de excesos (banquetes, fiestas, acontecimientos familiares, etc).
4. Cálculos en la vesícula
Con un procedimiento más sencillo que en el apartado anterior podemos conseguir un remedio sencillo pero efectivo para combatir los cálculos en la vesícula: con tomar una cucharada de aceite de oliva por las mañanas mezclado con unas gotas de limón y perseverancia japonesa (método Kaizen), poco a poco los cálculos de la vesícula se van solucionando.
5. Remedio casero para la acidez estomacal
Este remedio aún es más sencillo que el anterior y es que para aliviar la acidez estomacal basta con tomar una cucharada de aceite de oliva crudo por las mañanas en ayunas, con el estómago vacío para que el aceite pueda prevenir el malestar y actuar como protector sobre el estómago. Después hay que esperar dos horas antes de consumir algún alimento. Con estas sencillas instrucciones basta para olvidarse de esta dolencia.
6. Para el estreñimiento
Este remedio se sirve igual que el anterior sólo que aquí tomaremos dos cucharadas de aceite de oliva en crudo por las mañanas en ayunas. El aceite de oliva es un buen remedio para erradicar esta dolencia porque actúa como estimulante y laxante suave para tratar los problemas de estreñimiento. Si dicho estreñimiento fuese más serio podemos preparar una mezcla de una cucharada de aceite de oliva y otra cucharada de agua templada y aplicarlo en forma de enema.
7. Quemaduras
Ahora que empiezan los calores y no siempre nos acordamos de echarnos protector solar, éste es un remedio interesante para casos de emergencia ya que para mejorar y curar una quemadura es muy beneficioso aplicarse una cucharada de aceite de oliva. Nunca debemos hacerlo justo después de habernos quemado, siempre hemos de dejar unos minutos para que la herida respire. Notaremos un gran alivio ya que el aceite hidrata la piel y calma el dolor.
8. Estrías de la piel
Uno de los momentos más felices de una mujer en toda su vida es cuando un nuevo bebé ha llegado. Sin embargo tras el parto muchas veces aparece el problema de cómo eliminar las estrías del embarazo: la piel se estira demasiado durante la gestación por lo que las fibras de colágeno se rompen y aparecen los característicos “surcos”. Tras el parto, el peso de la mujer disminuye considerablemente, mientras que su piel, ya estirada, no vuelve a lo que era antes, lo que termina produciendo más estrías en caderas, muslos, vientre, glúteos y senos…
Para combatirlas podemos mezclar una cucharada de aceite de oliva con otra de aceite de germen de trigo (de venta en farmacias, parafarmacias y herbolisterías) y aplicar la mezcla en la piel dando un suave masaje. La hidratación irá mejorando las estrías.
Hay una gama enorme de productos para las estrías en farmacias, supermercados y tiendas minoristas, pero si tus estrías no son muy profundas y no tienes mucha prisa por hacerlas desaparecer la receta casera aquí proporcionada podrá ofrecer los mejores resultados y a un precio inmejorable. Aunque en este apartado nos referimos a las estrías “postparto”, el remedio sirve para cualquier tipo de estría.
Como en los apartados anteriores, el tratamiento mejora con la constancia en su aplicación.
9. El aceite de oliva contra el acné
Las propiedades antioxidantes del aceite de oliva junto con el mantenimiento de nuestra piel limpia e hidratada pueden proporcionarnos una combinación perfecta para resolver los problemas de acné.
Podemos elaborar un tónico con unas 10 gotas de aceite esencial de lavanda mezclado en un cuarto de litro de aceite de oliva con el que nos haremos masajes faciales en la parte afectada realizando suaves masajes faciales que después retiraremos con agua. Aplicando este tónico casero a diario notaremos una importante mejoría en no demasiado tiempo.
10. Aceite de oliva para tratar el cabello
Aunque pueda resultar llamativo el aceite de oliva sirve para tratar la caída del cabello y mejorar su brillo y estado general pues permite que el folículo piloso se relaje y que aumente el riego sanguíneo en la zona aplicada.
Para ello es recomendable masajear el cuero cabelludo y dejar que el aceite de oliva actúe sobre el pelo cubriéndolo con una toalla y dejando durante al menos diez minutos. Después lo aclararemos con agua y champú.
El aceite de oliva, como ya hemos mencionado con anterioridad es un hidratante natural para el cuerpo y el pelo por lo que le devolverá su brillo natural.
11. Aceite de oliva para tratar eliminar la costra láctea
La costra láctea es la forma coloquial de llamar a la dermatitis seborreica del lactante, o seborrea, que también se conoce como “caspa” cuando afecta a niños mayores o a adultos. Es relativamente habitual en recién nacidos y niños de hasta tres años de edad y genera escamas gruesas de color blanco o amarillo que se forman sobre el cuero cabelludo. Los tratamientos que se realizan a su debido tiempo sirven para evitar que la dermatitis se extienda hasta la frente y las cejas, como a veces sucede.
En estos casos, la simple aplicación de aceite de oliva sobre la zona afectada es suficiente para resolver el problema. He aquí, paso a paso, cómo eliminar las costras de la costra láctea:
1. Aplicar sobre la cabeza del pequeño una sustancia emoliente y realizar un masaje delicado.
2. Dejar actuar el aceite durante unas horas o, si resulta necesario, incluso toda la noche.
3. Lavarle la cabeza con un champú suave que no reseque el cabello.
4. Peinar al niño en el sentido del crecimiento del pelo con un cepillo suave, para eliminar las costras del bebé.
12. Eliminar los tapones de los oídos y el dolor de los mismos
Para eliminar los tapones de cera de los oídos, y eliminar el dolor de los mismos, es muy efectivo aplicar dos gotas tibias de aceite de oliva en los oídos cuando vayamos a dormir y cubrirlos con un algodón. Al día siguiente aplicamos en los oídos un poco de agua caliente con la ayuda de una jeringuilla y así conseguiremos que los tapones se disuelvan sin dolor.
13. Suavizar arrugas
Gracias al poder antioxidante del aceite de oliva y a la excelente hidratación que proporciona el mismo podemos suavizar las marcas de las arrugas y mejorar el aspecto de nuestro cutis si cada noche nos realizamos un masaje en el rostro con una cucharada de aceite y dos gotitas de limón. Conseguiremos mejorar el aspecto de nuestra piel que lucirá brillante, hidratada, flexible y más recuperada y rejuvenecida que nunca.
14. Hidratar el cuerpo con este aceite
Después de la ducha, si nos aplicamos una fina capa de aceite de oliva sobre la piel de nuestro cuerpo dejando que la piel lo absorba, la capacidad hidratante de este aceite conseguirá que nuestro cuerpo esté hidratado de manera casi inmediata, ya que se trata de un producto natural.
15. Fortalecer las uñas con el aceite de oliva
¿Cuántas veces hemos visto cajeras y dependientas con las uñas estropeadas? Su problema tiene fácil solución: basta con que depositen aceite de oliva en un recipiente y sumerjan sus uñas en él durante cinco minutos. Repitiendo esta operación cada día antes de acostarse conseguirán regenerar sus uñas e impedir que se estropeen de nuevo. Las propiedades del aceite de oliva consiguen fortalecer las uñas debido a que ayudan a restaurar la fuerza en las mismas cuando están secas y agrietadas.
16. Aceite de oliva para disminuir el cansancio de los pies
Al igual que ocurre con nuestras manos y uñas agrietadas, nuestros pies también sufren el estrés, el ajetreo y el no parar de la vida moderna, y no siempre les cuidamos como deberíamos. Pero con un gesto tan sencillo como masajearlos con unas gotas de aceite de oliva podríamos mitigar el cansancio diario, evitar que se agrietasen y mantenerlos en plena forma para continuar dándoles el uso que necesitamos.